Mis saludos por un nuevo 24 de marzo.

Intercalo algunos de los temitas que más se escuchaban en los setenta (no, no estaba rankeado "A desalambrar")

Los Campanelli. La familia unida, la mesa llena.
Las cosas sencillas. Y que volviera Perón.

A la izquierda forra, chupaculo, de saco y corbata, socialista por comodidad, cómplice de los procesistas. A la otra izquierda sicópata, que en nombre de los que lo único que querían era conseguir alojamiento en el hotel sindical de Mar del Plata en enero, les dijeron que eran tan ignorantes que iban a hacer la revolución en su nombre.

Sepan manga de boludos que en la década del Setenta el trabajador argentino era feliz. La clase media era feliz. Los ricos en este país eran felices. Hasta los pobres eran felices. Y no se lo bancaron, nos tuvieron que hacer mierda a todos.

A los sicópatas de la Triple A que usaron la estructura del Estado para su festín de sangre en nombre del peronismo. A los Montoneros que pensaron que para hacer la Liberación Nacional había que hacer terrorismo, secuestrar y matar cobardemente usando el nombre de los infernales de Güemes y la confianza de sus compañeros. A los del ERP manga de enfermos mentales, a los pajeros de la FAR.

A los milicos que asesinaron y torturaron, a los que usurparon el uniforme de Brown, Bouchard, Belgrano y San Martín para vendernos por dos monedas. A los que arruinaron el respeto por nuestras Fuerzas Armadas y al país para chorearse unos muebles o los bebés de otros.

A toda esta manga de hijos de puta que sobrevivieron entregando a sus compañeros, o huyendo cobardemente, que se enriquecen en su nombre como los Montoto, Kunkel, la yegua de la Garré y a todos los marginales de las organizaciones de ayer que siguen siendo los marginales de hoy, que se les llenan los ojitos de lágrimas por los que no están pero son incapaces de hacer una autocrítica mínima sobre las imbecilidades que se mandaron.

A todos les pregunto:

¿Para qué querían cambiar el
país si ése estaba buenísimo?

Me olvidaba de los empresarios nacionales y extranjeros que alentaron el golpe y a los tres meses estaban arruinados con los paraguas chinos, los televisores de Brasil y la bicicleta financiera; y ahora tienen que sobársela a Kirchner para cubrir el rojo de los bancos y a Guillermo Moreno para que los deje producir. Jodanse por berretas y soretes.

Pero en algo coincido con el discursete oficial, y es que esto puede volver a pasar. Porque hay mucho enfermo creyéndose que hace política en nombre nuestro. Que si tuviera un poco de huevos y la orden exacta, nos mandaría a matar por pensar diferente, por hacer la nuestra.

Y les dejo mis saludos:

Vayanse todos a la
puta madre que los parió.

Forbidden actualizó su Blog con su visión sobre este tema.

Si quieren un pantallazo de los otros 70, no dejen de darse una vuelta por acá.

No iba a escribir nada sobre este tema para no hacerle el jueguito a los forros que con el verso de la Memoria, se acuerdan de lo que quieren. No pude resistir la ganas de putearlos a todos.

Un poco de Paz para nuestras mentes afiebradas. Un sólo amor.
http://playingforchange.com/

Sé que el perdón disuelve el pasado. Pero todavía estamos verdes.