Harto

Harto de escuchar a los familiares de los secuestrados de las FARC a la espera que los suelten.

Harto de los asambleístas que pasaron la Nochebuena en la Ruta enculados porque Uruguay les cortó los accesos y les cagó la idea.

Harto de la falta de un vocabulario de al menos 500 palabras de los hermanos de Mariana de Melo que no encuentran la manera de explicar cómo va la vida de la trola.


Harto de las notas sobre de las víctimas de la inseguridad navideña, que les pegan un mamporro en la cabeza y piden la pena de muerte; y de los hijos de puta que borrachos atropellan y matan a la gente.

Harto de que las estadísticas de los quemados y de los tuertos a corchazos sólo sean las de Capital Federal, nabos hay en todos lados del país.

Harto de los ex trabajadores del Casino Flotante de Buenos Aires acampando donde pinte.

Harto de las notas pelotudas como la Navidad en Maldivas y Tailandia, la falta de dinero en los cajeros automáticos y lo caras que serán las vacaciones en Las Toninas.


Harto de los pejertos que calman sus angustias existenciales comprando hasta las tres de la mañana en los shoppings y cuando les hacen una nota hablan del espíritu navideño.

Harto de los clips musicales de la Negra Sosa y Soda Stéreo en Canal 13 y TN.

Harto de los boludos que se queman las manos con cohetes, de los espúpidos que apuntan las botellas de sidra al ojo del cuñado y de los que, para joder, le prenden fuego la casa al vecino con una cañita voladora.

Harto de la Navidad, de la comida que engorda, de la familia, del calor, y de los pendorchos que tiran petardos a cualquier hora.


Harto de comprobar empírica y científicamente que lo mío con la Sharapova no será posible.

Se me terminó el espíritu navideño. No jodan más, estoy jugado, que venga la jueza y las cámaras de Crónica Tv


Gracias a los Pibes de "El Fondo" y a todos los compañeros que están privados de su libertad.

A vos Cristina, si al menos hubieras emitido un comunicado saludándonos por la Navidad te putearía por eso, pero claro, estás taaaannn ocupada viendo la manera de zafar del valijeo bolivariano que ni éso. Al menos tuviste que pasarte cuatro días enteros con Néstor, escuchando sus chistes malos, sus anécdotas repetidas, su mal humor y su colon irritable, jodete.