Como en los ´50 es la Argentina la que salvará al mundo decadente y hambriento. Nuestra producción inundará nuevamente las gándolas vacías del capitalismo derrumbado. Nuestros trapos de piso, pañales descartables, artesanías con palitos de helado y frascos de perdiz en escabeche de los microemprendimientos de la Patria llevarán alegría y consuelo a un mundo que no entendió los nuevos paradigmas.
Algo entendió George Bush de las crisis argentinas: en lugar de rescatar y salvar al pequeño ahorrista o al inversor inmobiliario, su plan apunta a salvar a los grandes bancos y trust especuladores. La doctrina Kirchner de ser duro con los débiles y servil con los poderosos ha comenzado a rendir sus frutos.
La moda que arrancó en los boliches de sortear cirugías estéticas para captar al público sin tetas es una idea genial para aplicar en otras ámbitos de la Colonia. El lanzamiento del Plan Casa Propia es una adaptación del Plan Teta Propia. Los que necesiten una vivienda se afiliarán al PJK y obtendrán un cartón con forma de casita en el que mediante una raspadita tendrán derecho -si la suerte los acompaña, como en todo- a acceder a la vivienda. Si le salen tres caritas de Kirchner, las Madres de Plaza de Mayo les harán el Duplex Progre donde los ganadores quieran.
Chicos pobres del Primer Mundo capitalista esperan ansiososla vianda argentina que calme su hambre y su tristeza
Cristina, que vivirá en un frasco de zapallo en almíbar pero no es boluda, sabe que la crisis obliga a cuidar los recursos nacionales. Se acabaron las viandas para todos. Largará en los actos públicos concursos por sanguches y alfajores.
En la Patria Progresista el alfajor era un derecho y el sanguche una reivindicación social, pero la crisis mundial obliga a reformular esos principios sociales: Ahora todos tendremos derecho a un número para los sorteos.
Cristifrase
"En momentos en que viejos paradigmas están cambiando, tenemos que tener
la cabeza bien abierta porque ingresamos en la etapa del conocimiento,
de nuevas habilidades, sino también en la posibilidad de
interactuar más inteligentemente entre Estado y mercado".
la cabeza bien abierta porque ingresamos en la etapa del conocimiento,
de nuevas habilidades, sino también en la posibilidad de
interactuar más inteligentemente entre Estado y mercado".
Cristina Elisabet Fernández de Kirchner
Empleada Pública paradigmática. Interactuadora nacional.
Buenos Aires, 29 de setiembre Año I de la restauración estatal.
Empleada Pública paradigmática. Interactuadora nacional.
Buenos Aires, 29 de setiembre Año I de la restauración estatal.
Los dos ambientalistas que se colgaron del Obelisco pidiendo se aplique el plan Basura Cero desmintieron que su reclamo incluya la salida del gabinete nacional: "Los únicos residuos que buscamos son los que se puedan reciclar" dijeron.
La que se sacó la grande y demuestra que la argentinidad es una bendición de Dios que no nos quiere ver trabajando, es la ex policía aeronáutica. Mientras nosotros estamos acá cagándonos de frío ella está en Miami. Me la juego que "Lorena", tal su nombre artístico (?) Telpuk pide asilo político y con el dinero que le debe de haber dado la gentusa de Julio de Vido arranca con una parrilla argentina en Fort Lauderdale. Zafar es nuestro destino manifiesto.
La agrupación Patria Trola saluda y le desea éxitos ala afiliada Telpuk que intentará dejar bien alto
el nombre de Argentina en el concierto de la naciones.
En cambio, lo que viene muy bien son las conferencias donde la chiruza, reodeada de funcionarios de saco y corbata se despacha con sus discursetes. Antes me parecían huecos y sin sentido; ahora descubro que tienen un hilo conductor: su necesidad de agradar, de ser considerada, querida y respetada.
Es un error suponer que apunta a mostrarse como una dirigente instruída y capaz. Es el pedido de auxilio de una mujer desesperada y sin amor. Pero como típica fobia no resuelta, se acerca y enseguida se aleja. Quiere que la respeten y la amen, y rápidamente se hace rechazar y odiar.
Todo eso mechadito con los mohínes infantiles de caritas y expresiones estudiadas en el espejo durante horas, con facciones y gestos dormidos en base a toxinas botulímicas; con un barniz cultural de revista científica e informativo televisivo.
Y abajo nosotros, la plebe ignorante, primaria, con necesidades existenciales y materiales irresueltas, desesperados también, buscando que nos respeten pero sin hacer nada para lograrlo.
Ya pasó un nuevo clásico ganado, ya me hice judío por un día para no trabajar en Año Nuevo. Ahora no me queda otra que seguir disimulando, haciendo como que me interesa algo de lo que me da dinero.
Es el precio de vivir en el granero del mundo.









































